REGLA DE LOS TERCIOS

Estoy segura que habéis oído hablar mil veces sobre la regla de los tercios, pues bien, para los que aún no sepáis que es exactamente, intentaré explicarlo de la manera más breve y sencilla  que pueda.

Para trabajar en fotografía solemos ayudarnos de una serie de normas o reglas de composición que nos harán más fácil encontrar esa armonía o equilibrio que hace nuestra imagen más agradable al ojo. Normas que son importantes que aprendamos, interioricemos, olvidemos e incluso rompamos de vez en cuando (a veces hay que ser un poco traviesos). La regla de los tercios, es probablemente la más conocida y usada en fotografía, es la simplificación de la proporción Áurea y la secuencia de Fibonacci y consiste simplemente en dividir nuestro formato (la imagen) en tres tercios imaginarios de manera que los elementos que queramos destacar se posicionen en uno de los puntos fuertes o de interés resultantes de la intersecciones que separan los tercios. Estas líneas se denominan también líneas de fuerza o de interés y aunque algo menos notorias que sus uniones, también nos ayudarán a atraer la atención sobre los elementos cercanos, como veis es súper sencillo y os aseguro que muy eficaz. Por último y en relación a ésto, una regla que os encantará a los amantes del paisaje, la Regla del Horizonte, que no es otra cosa que situar vuestro horizonte en una de las líneas horizontales.